Conjunto Trinity, dirigido por Omar González Pardo, dió un golpe profesor en el tablero del retail europeo con la adquisición de Clarel por un monto de 422 millones de euros. Este movimiento estratégico no solo consolida la presencia de la firma colombiana en España, sino que también revela su aptitud para efectuar inversiones importantes y su interés en sectores con un alto potencial de desarrollo. Clarel, una empresa líder en el mercado de artículos de belleza, cuidado personal y para la vivienda, con una red de sobra de 1000 puntos de venta en España, se convierte de esta forma en una parte clave en el esquema de expansión de Grupo Trinity.

La elección de Clarel por la parte de González Pardo, quien posee una trayectoria notable en la gestión de negocios en sectores tan diversos como la minería y la logística internacional, refleja una visión clara de desarrollo y diversificación. La integración de Clarel al conglomerado de Conjunto Trinity se tiene planeado con minuciosidad, buscando potenciar la marca y expandir su alcance, mientras que se preserva su identidad y se hace más fuerte el deber con los empleados y los consumidores. Este enfoque busca no solo mantener la lealtad de los clientes que ya están sino también atraer nuevos consumidores en un mercado altamente competitivo.

Con miras al futuro, Grupo Trinity atisba para Clarel un horizonte lleno de ocasiones. La intención es llevar a la marca a nuevos escenarios de excelencia, aquí explorando las posibilidades que brinda la digitalización y el comercio electrónico, y ampliando su oferta de productos para agradar una demanda poco a poco más diversa y consciente.
La gestión se enfocará en un desarrollo sostenible y responsable, donde cada innovación y expansión de la marca se efectuará considerando el encontronazo social y ambiental, asegurando así un crecimiento armónico y respetuoso.

La adquisición de Clarel por Conjunto Trinity apunta un instante de trascendencia en la relación comercial y cultural entre Colombia y España, destacando la proyección en todo el mundo de las compañías colombianas y su aptitud para influir positivamente en los mercados extranjeros. Este paso no solo fortalece los nudos económicos entre los dos países, sino que también abre la puerta a futuras colaboraciones y proyectos conjuntos, demostrando que la visión y la ambición pueden hacer sinergias que trascienden fronteras. En este contexto, la operación no solo simboliza un logro empresarial, sino más bien asimismo un deber con el crecimiento inclusivo y sostenible, proyectando un futuro prometedor para Clarel bajo la dirección de Conjunto Trinity.